jueves, 21 de marzo de 2024

14/52

Escrito con letras temblorosas en un pedazo de cartón, un anuncio colgaba de la pared del edificio: "Vendo mis últimas esperanzas o las intercambio por sueños rotos que se puedan reciclar". Lo miré fijamente, sintiendo una mezcla de curiosidad y desolación. La frase resonó en mi mente con una extraña familiaridad.

Entré al edificio, la curiosidad me empujaba a buscar al autor de tan peculiar oferta. Llegué al departamento 7-B. Rebeca, una artista que había visto cómo sus sueños se marchitaban uno a uno, se había decidido a dar un último paso antes de rendirse por completo. No le quedaba nada más que ofrecer, sólo las últimas migajas de su esperanza, convertidas en ese extraño anuncio. Abrió la puerta.

Mis ojos se encontraron con los de Rebeca. Un silencio incómodo se apoderó de nosotros, pero me atreví a preguntar: "¿Qué esperas a cambio de tus últimas esperanzas?". Ella me miró con sorpresa, no esperaba que alguien respondiera a su peculiar oferta. Dudó un instante antes de responder: "No lo sé... algo que me ayude a seguir soñando, aunque sea sólo un pedacito de un sueño roto".

La miré con nostalgia, recordando todo lo que había dejado atrás. "Yo tengo algunos sueños rotos", dije. "Tal vez podamos hacer un trueque". Ella se sintió intrigada. "Cuéntame sobre tus sueños rotos",  me dijo invitándome a pasar.

Me senté frente a ella y conversamos. Le conté de mis letras que nunca se habían publicado, de aquella beca que perdí, de ese "no" que recibí por respuesta. Rebeca, me contó a su vez sobre sus sueños de ser pintora, de sus lienzos vacíos y de la soledad...

Pasaron las horas, al atardecer nos dimos cuenta: aún compartíamos una chispa de esperanza. Los sueños rotos, al ser compartidos, se transformaron en algo nuevo. Ahora unidos por un mismo anhelo, nos embarcamos en un nuevo viaje, con la esperanza de que, juntos, nuestros pedazos rotos pudieran crear algo hermoso.

En el taller de Rebeca, entre pinceles y lienzos manchados, nuestros sueños rotos se fusionaron. Las letras que no se habían publicado se convirtieron en poemas inspiradores y  el "no" se convirtió en un "sí" a la posibilidad de crear algo nuevo.

Twitter: Owiruame

No hay comentarios. :

Publicar un comentario

Agradezco tu visita y comentarios!