El varón tomó el fuego, la mujer el agua; el varón tomó la tierra, la mujer tomó las alas del viento.
Por eso el varón se esforzaba, dominaba y destruía; mientras Lilith fluía, fecundaba la tierra, era libre.
El varón se ató a la tierra, por ello se soñó hecho de barro. Lilith voló hacia el oriente, lejos de de los dioses, de los varones, de la guerra y del dominio.
La leyenda dice que Lilith busca la semilla de los hombres, nada es más falso, aquellos que sueñan con la libertad son semilla que nacen cuando Lilith riega la tierra.
Hija del viento, mujer de agua; ven refresca mi vida, hazme volar en tus alas a la libertad.
por: Miguel Quintero
Twitter: Owiruame
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